31. TRENCITAS II

Si no sabes quien es "Trencitas", te dejo el enlace del capitulo donde relato el día que la conocí y así la conocerás mejor:

https://clientespeculiares.blogspot.com/2019/11/12-trencitas-presentacion.html

 Como comenté en el anterior capitulo, las visitas de "Trencitas" eran habituales. Los siguientes días que me visitaba fue aumentando de productos que quería adquirir y de preguntas que eso conllevaba, ya no solo me preguntaba por las extensiones castañas oscuras o negras, o de las grapas negras...  Además ya me pedía cepillos especiales para peinar las extensiones, se llevaba uno cada vez que me compraba el pelo, ni las extensiones y ni el cepillo le duraba seis escasos meses.  


 Y ella gastaba todos los paquetes que se llevaba en seis meses. Lo peor es que siempre iba con un moño recogido malamente con una pinza de plástico y con el pelo sucio y grasoso.


También le dio por comprarse desrizantes para alisarse el cabello (que no lo tenia rizado, mas bien encrespado). Venia y me inclinaba la cabeza para que se la viera (imagínate la guantada que recibía yo en la nariz con ese olor que desprendía).  Pero para seguir contando tengo que hacer un paréntesis para explicar en que se basa un desrizante:


Y la peluquera no le dijo cual tenía que llevarse.  Cuando le pregunte qué número quería, ella me preguntó: 

Trencitas: -¿Qué diferencia hay muchacha?-

Yo: -El número cero es para un cabello muy rizado, que no es tu caso.  El número uno es para un cabello muy rizado y a la vez teñido, que tampoco es tu caso.  Y el número dos es más suave, es para un cabello más bien ondulado y muy estropeado, que es tu caso-  

Se me queda mirando reflexionando con lo que le acabo de decir, y me dice: 

Trencitas:-Mira muchacha, yo lo tengo muy rizado. Es que me crece así.  Por eso la peluquera quiere echármelo para que quede igual de lisas que las extensiones- 

Y se vuelve a inclinar para que le vea su raíz, (eso no era rizado, eso eran pelos rotos y muy estropeado, pero quien era la guapa que se lo decía). 

Yo:-Ve a tu peluquera que conoce bien tu pelo y le preguntas cual te llevas- Le dije pensando que se iba a ir y vendría otro día, (ingenua de mí) 


Sacó su móvil de su chaquetilla corta (Sí, es la misma de siempre, ni siquiera le quita la mancha de maquillaje marrón del cuello. Eso está ya incrustado en la chaqueta) y marca el número de la peluquera: 

Trencitas hablando por teléfono:-Hola, soy yo.  La muchacha de la tienda me pregunta que número me compro de desrizante… ¿el 2?... es que ese no es para rizado…¿seguro?....yo compraría el 1 ¿has visto que rizada tengo la raíz?...vale…entonces el 2… vale… vale… vale… adiós-

Se guarda el móvil y me dice: 

Trencitas: -La peluquera me ha dicho que me compre el dos, porque lo tengo muy estropeado y vaya que el uno me destroce el pelo (¿destrozárselo?... se quedaría calva).

Pero no quedaba ahí la cosa, ¿te acuerdas lo que hacía con los paquetes de extensiones?... Sí, también cogía todas las cajas y le hacia la rueda de reconocimiento en caso de que tuviera algún rasguño o manchita la caja. Y a los cepillo también.

Con el tiempo también añadió a la compra un baño de color con su emulsión… y ¡¡Sí!! También tuve la misma discusión de si ponerse el color castaño oscuro o negro, pero no para que le hiciera juego con las extensiones, sino con sus negras, negras, negras cejas.



Acercaba su cara  a la mía para que le viese bien el color de sus cejas, y sin intentar lanzar arcadas le decía sin pensármelo: 

Yo:-Castaño oscuro-. 

Trencitas: -¿Seguro? tu piensas que es castaño oscuro... Mira bien (se acercaba mas a mi)... ¿No es negro? Mejor el castaño oscuro ¿no?...

Yo: Si el castaño oscuro

Saca el teléfono.

Trencitas hablando por teléfono: -Hola, mira que voy a comprar el baño de color, porque tinte no me hecho ¿no?... ah claro... si.. si... es mejor para mi pelo.... claro... vale.  Me ha dicho la muchacha de la tienda que tiene que ser castaño oscuro... ah vale... si... si... pues entonces me pongo ese.  Gracias... nos vemos el viernes... ya tengo todo aquí apartado... vale... adiós-

Cuelga, se acerca a mi y me dice:

Trencitas:-Mi peluquera dice que me eche el castaño oscuro. ¿Cuantos tienes del castaño oscuro?

Yo: -Tres-

Trencitas: -Voy a ver las cajas (risa nerviosa)... tu sabes como soy jejejeje-

Y sí, se pone a inspeccionar las cajas, hasta que elije uno.

Cada vez que venía "el familiar" a soltar dinero, la cuenta subía y subía cada vez más.  Cogía unos cabreos que no veas, pero soltaba el dinero y ella se llevaba su compra tan feliz.

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